Confesiones de la geisha Keiko Fujimori - Parte I

El pasado viernes 13 en el semanario de Cesar Hildrebrandt salió publicada la manifestación que hiciera  el 29 de mayo de 2001 Keiko Sofía Fujimori Higuchi ante la entonces Fiscal Adjunta Suprema Gladys Echaíz, unos meses después que su padre Alberto Fujimori había renunciado a la presidencia del Perú mediante fax, después que salieran a la luz los videos donde se mostraba cómo había manejado la mafia fujimontesinista el Perú.

Como era de esperarse tenían y fueron investigados ‘todos’ los allegados al dictador, en aquella Manifestación que tiene sello del Ministerio Público hace ahora 10 años, la ahora candidata de la Dinastía Fujimori confesó haber recibido dinero de su padre en sumas de $10,000 cada vez que venía al país por motivos del ejercicio de Primera Dama, y durante todo el tiempo que duraron sus estudios en los Estados Unidos de América, al inicio de cada ciclo. Ésta es la manifestación de boca de la propia hija del dictador:

“...que el pago de la Universidad y de sus gastos de mantenimiento los solvento su padre, quien le entregaba dinero en efectivo cada vez que la declarante venia al Perú, en sumas que nunca pasaban de US.$ 10,000.00 diez mil dólares, que la declarante venía al Perú casi mensualmente, dependiendo de las actividades que tenía como Primera Dama, que cuando no ejerció este cargo, no venía al Perú y su padre le entregaba el dinero al inicio del ciclo…”

Lo que nadie sabía es que diez años después aquella Fiscal Adjunta (Gladyz Echaíz) sería hoy Fiscal de la Nación, la misma a la cual Keiko Fujimori debería haber rendido su manifestación hace más de un año (pero que por astucias innatas del clan Fujimori ha venido evadiendo) por la investigación que se le sigue por enriquecimiento ilícito. Por esto si Keiko hubiera decidido manifestar a la Fiscalía de la Nación lo habría hecho ante la misma persona a la que manifestó hace diez que el dinero lo había recibido de propias manos de su padre.

Lo que resulta increíble es que la candidata nunca le haya preguntado a su padre como solventaba sus estudios su el entonces Presidente manifestaba que solo percibía por el cargo el monto de $2,000 mensuales, lo cual no explica cómo es que se gastaron entre Keiko y sus hermanos $1’480,000.00 en viajes de placer, manutención y estudios. Esto resulta improbable más si recordamos aquellas declaraciones de la madre de la candidata, Susana Higuchi en la que dijo textualmente:

“que a fines de 1993, abrió una caja fuerte que se encontraba en la alcoba que compartía con sus entonces esposo, en presencia de sus hijas encontrando en una bolsa plástica la suma de $100,000. Así mismo, refiere que fuera de dicha bolsa había la suma de $10,000 entre otros objetos y joyas”

En conclusión si la aspirante al poder hubiera decido presentarse a declarar ante la doctora Gladyz Echaíz, hubiera dicho esta vez que no, que su padre no le daba los diez mil dólares y se hubiera visto envuelta en un círculo de mentiras. La decisión de no querer manifestar es notoria y ahora sabemos por qué, lo que si extraña es la pasividad con la cual la Fiscal Gladyz Echaíz ha llevado la investigación y no darle curso al expediente, durante estos meses que no la investigada no se ha personado para rendir su manifestación.

ATTE.

Albert TorSan.